Juan Carlos Díaz se despide del CD Bonares tras una histórica temporada
El técnico de La Palma cierra su ciclo en el banquillo bonariego tras llevar al club por primera vez a los play-off de ascenso a División de Honor
El Pinzón da el primer golpe en el derbi y acaricia el ascenso a División de Honor
(Juan Carlos Díaz)
El CD Bonares y Juan Carlos Díaz separan sus caminos tras una temporada inolvidable. El técnico natural de La Palma del Condado ha decidido no continuar al frente del banquillo bonariego, poniendo fin a una etapa breve pero histórica, en la que consiguió clasificar al equipo por primera vez en su historia para las eliminatorias de ascenso a División de Honor, rozando la final y dejando una huella imborrable en el club y en la afición.
Aunque la entidad le hubiera gustado seguir contando sus servcicos una campaña más al frente del proyecto, el entrenador ha optado por rescindir de manera unilateral, con la intención de esperar un nuevo proyecto más ambicioso de cara a la próxima temporada.
Una etapa brillante e ilusionante
Juan Carlos Díaz llegó el pasado verano al Bonares tras su paso por las categorías inferiores del Siempre Alegres, afrontando su primera experiencia como entrenador de un equipo sénior. El resultado no pudo ser más positivo: además de firmar una notable campaña liguera, el equipo consiguió un histórico pase a los play-off de ascenso, enfrentándose con valentía al campeón CD Moguer y haciendo soñar a toda una localidad.
El técnico se despide del club por la puerta grande, agradecido y emocionado por todo lo vivido. Así lo reflejó en su sentido mensaje de despedida:
«Una vez pasado un tiempo, y tras meditarlo mucho, es el momento de decir adiós a este club y este pueblo que en tan solo una temporada, han pasado a ocupar un lugar muy especial en mi corazón. Ha sido un año intenso, emocionante y, sobre todo, inolvidable. Juntos hemos logrado algo histórico.»
«Lo que habéis logrado no es solo un éxito deportivo, es una declaración de identidad, de orgullo, de amor por un escudo y lo que representa. Ha sido un placer ver a cada uno de vosotros defender estos colores sabiendo que lo hacíais por vuestra gente, por vuestra familia, por vuestras raíces…»
«Habéis demostrado que, cuando hay compromiso, humildad, trabajo y sentimiento, no hay límites. Gracias, de corazón, a los jugadores, por dejarse el alma en cada partido; a la directiva, por darme la confianza; al cuerpo técnico, por creer siempre en lo que hacíamos; y cómo no, a esa afición que no ha fallado nunca y que siente este escudo como parte de su propia historia.»
«Me voy con el orgullo de haber formado parte de un equipo que ha sido capaz de hacer historia, con humildad, con valores y con un inmenso amor por su pueblo. No sé qué deparará el futuro, pero sí sé que el C.D. Bonares siempre contará con un aficionado más. Gracias por el cariño, el respeto y el trato que me habéis dado. Me voy, pero una parte de mí siempre se quedará con vosotros.»
El CD Bonares pierde a un referente en el banquillo, pero gana un aficionado eterno. Mientras tanto, el nombre de Juan Carlos Díaz ya está escrito con letras doradas en la historia del club.
