RECREATIVO IES LA ORDEN-CB RINCONADA | EL «CLÁSICO»
Previa de la gran final de la liga

(Foto: Ayto. De Huelva)
Entre los dos, suman 19 títulos de liga, y un buen puñado de subcampeonatos; podríamos decir que el Recreativo IES La Orden y el CB Rinconada son el Real Madrid y el Barcelona del bádminton, si bien y, viendo el dominio hegemónico de ambos en la División de Honor, tal vez sería más correcto afirmar que el Madrid y el Barcelona son el Recre y el CB Rinconada del fútbol. Los rinconeros son el conjunto más laureado de la liga, con 12 títulos, y nosotros el absoluto dominador de la última década, con 7; vuelve la final más grande de todos los tiempos, y vuelve el CLÁSICO: no existe nada igual y, sin embargo, sólo hay que pasarse por el Andrés Estrada, a partir de las 17:30, para poder decir «yo viví aquella final».
Sería casi una ofensa para los nuestros no darles, aunque fuera a los puntos, como favoritos: no sólo son los actuales campeones, sino que consiguieron «la séptima» el mismo año de su regreso del infierno, ante los sevillanos, y ante el asombro también de todo el mundo del bádminton: un recién ascendido, que no había tenido tiempo de planificar la temporada, se imponía en una competición que parecía contar al principio con seis o siete aspirantes a ganarla, por cómo se habían reforzado todos los equipos. Esta vez y, además de seguir teniendo «lo que no tiene nadie» (Pablo Abián, Telma Santos, Haideé,…) se han unido al grupo Daniella Gonda y Alberto Perals, quienes han elevado aún más el nivel del IES, y en quien hemos puesto, una vez más, todas nuestras esperanzas para que lo vuelvan a hacer.
Sin embargo y, si analizamos las plantillas, lo más acertado es decir que la final está al 50%; si años atrás la sensación era la de que el Recre era sensiblemente más fuerte, y se respiraba una cierta y fundada confianza pensando en el desenlace del clásico, este año Rinconada no tiene peor equipo: a las hermanas Molina y Nerea Ivorra las acompañan Cláudia Leal y, sobre todo, Beatriz Corrales, quien llegara a ser la 20 del mundo, y que es una de nuestras jugadoras nacionales más laureadas de la historia. Y Bea no es la única gran estrella de los rinconeros: Tom Wolfenden o Carlos Piris son puntos muy fuertes, en cuanto a los chicos. Si lo traen todo (porque, lo traerán esta vez, ¿no?), muchos de los encuentros de la final podrían decidirlos, un simple detalle.
Y, si nos metemos ya con el partido en sí, lo primero que hay que decir es que con tanta igualdad, los cruces podrían dar o negar la gloria a unos y otros: nos interesa que Pablo caiga emparejado con su jugador más fuerte, para poder tener esa doble opción en el individual masculino, y que Telma, Laura Santos o Daniella Gonda (según el plan que tenga el IES) ganen, al menos, uno de los femeninos, y tratar de sacar tres puntos de los cruces individuales; para que al Recre le salgan los números, Pablo y Haideé tienen que ganar el mixto, y no sólo por las matemáticas, sino porque la cuestión psicológica de asestar el primer golpe, en un Andrés Estrada que tiene que rugir de un modo que haga temblar sus muros. No será fácil; a saber cuál será la estrategia de los sevillanos, pero ya sea Laura o Claudia Leal quien acompañe a Wolfenden, el partido será de infarto. Y, a buen seguro que ellos basan sus cuentas en los otros dobles: Beatriz Corrales es, de un lado, su gran «arma», y en el masculino tienen una legión de primeras raquetas, especialistas en dobles. Todo está muy ajustado, y si uno de los dos consiguiera una ventaja más allá de un sólo punto, tendría media final en el bolsillo.
Y es por esto, que es fundamental que llenemos el pabellón; tenemos que devolverle al Recre todo lo que nos ha dado estos últimos años. Y no hay mejor modo de hacerlo, que animarles, para que saquen un buen resultado y vayan a Sevilla a intentar ganar, para nosotros, un nuevo título en las mejores condiciones posibles.


