ÓMICRON VS FÚTBOL
La nueva variante del COVID-19 que pone en jaque al fútbol
(Fotos: sportshuelva.com / David Gómez )
La RFEF informó el pasado martes mediante una circular (Nº58) publicada en la web de la federación, la prórroga del “protocolo actualizado a la nueva situación social para las competiciones”. Dicho protocolo, que tenía marcada su finalización el 31 de diciembre de 2021, será prorrogado como mínimo y siempre en función de la evolución de la pandemia hasta el 3 de abril de 2022.
La nueva variante ómicron de la COVID-19 destaca por su rápida capacidad de propagación, registrando una incidencia acumulada en España de 911 casos por cada 100.000 habitantes según el último informe compartido por el Ministerio de Sanidad. El aumento de casos notificados y la elevada incidencia acumulada han hecho saltar las alarmas en Las Rozas, propiciando de esta manera la prórroga de las medidas sanitarias fijadas a comienzo de temporada, con el fin de frenar los contagios y su propagación dentro de los vestuarios y, por consiguiente, la suspensión de partidos de fútbol a causa de un posible brote en alguno de los equipos.
Esta circular, que hace referencia a la ya publicada el 14 de octubre donde indica las medidas a seguir entre los que destacan: la toma de temperatura a todos los miembros de los equipos antes del comienzo del partido donde, además el jugador debe haber cumplimentado la declaración responsable que será reflejada en el acta del encuentro.
Por otro lado, todos los integrantes del banquillo deberán llevar obligatoriamente la mascarilla, excepto el entrenador cuando de instrucciones a sus jugadores y los futbolistas suplentes que estén realizando ejercicios de calentamiento, también la obligación de eludir saludos y muestras de afecto, sustituyéndolas por otras fórmulas de contacto y el establecimiento de turnos para el uso del vestuario si no se pudiera mantener la distancia de seguridad.
Además de todas estas medidas anteriormente indicadas, hay que sumarle la realización de test de antígenos a todos los jugadores con una periocidad de 15 días necesariamente entre las 72 y las 48 horas previas al primer encuentro de este periodo quincenal.
Ómicron y su rápida expansión empieza a asustar, no sólo a la RFEF, sino también a los equipos de fútbol que podrían verse ante la posibilidad de tener que disputar sus encuentros sin público en las gradas.