La presencia de Marcelo Fígoli en el Nuevo Colombino marca una jornada caótica bajo la Borrasca Claudia

El futuro accionista del Recreativo presenció de primera mano las deficiencias del estadio durante la suspensión del choque ante el UCAM Murcia

¿Cuándo podrá disputarse el Recre-UCAM?

 La jornada vivida ayer en el Nuevo Colombino dejó mucho más que la suspensión del partido entre el Recreativo de Huelva y el UCAM Murcia. Entre el caos provocado por laBorrasca Claudia -entre otras cuestiones-, que volvió a poner en evidencia el mal estado del estadio, una figura volvió a captar todas las miradas: Marcelo Figoli, empresario argentino, dueño del Burgos en España, del Juventud de Las Piedras en Uruguay y futuro accionista del Decano con un 4,99% del capital social, actualmente en manos mayoritarias de Adrián Fernández.

Figoli se dejó ver nuevamente por el palco del Colombino, siguiendo muy de cerca todo lo ocurrido en una tarde que debía comenzar a las 16:00 horas y que terminó en suspensión definitiva tras una hora de espera. Su visita no fue casual. El empresario acudió a Huelva para continuar con su seguimiento del día a día del club y, con ello, fue testigo directo de las múltiples deficiencias estructurales que presenta el estadio, dejadas al descubierto por el fuerte temporal.

Los desperfectos, especialmente en la cubierta de Tribuna, evidenciaron la urgencia de una intervención. De haberse desprendido alguna de las planchas metálicas, la historia hoy sería muy distinta. Una preocupación que Figoli pudo comprobar in situ, acompañado por Mauro Cetto, director deportivo del Juventud de Las Piedras y su hombre de confianza en lo deportivo. Junto a ellos, otras tres figuras del entorno del empresario argentino siguieron de cerca todo lo ocurrido.

Cetto, quien ya había estado presente en Huelva esta temporada —concretamente en el duelo que enfrentó al Recre y al Xerez, que terminó con derrota por 1-2— volvió a aparecer en un momento que no pasó desapercibido, especialmente por las suspicacias generadas en aquella ocasión en torno a la figura de Pedro Morilla.

Una jornada marcada por el temporal, la incertidumbre y la presencia de quienes están llamados a formar parte del futuro institucional del Decano.