Carlos Ramírez se marcha del Bollullos CF mientras el club sigue pendiente de su futuro institucional
Sin directiva estable, con salidas clave y muchas dudas: el club espera una respuesta institucional para evitar la parálisis total
Kiki, sustituto de Arias en el banquillo del CD Rociana
(Carlos Ramírez//@bollulloscf1933)
El verano ha comenzado con incertidumbre en el Bollullos CF. Cuando debería estar trazándose el nuevo proyecto deportivo para competir en una Tercera Federación cada vez más exigente, el club se encuentra en una situación de bloqueo institucional que amenaza con dejar en pausa todo el trabajo realizado en las últimas temporadas.
En la última asamblea celebrada por la entidad, no se presentaron nuevas candidaturas para asumir la presidencia, por lo que el Bollullos CF permanece bajo el control de una Junta Gestora hasta el próximo 12 de junio, fecha en la que se convocará una nueva reunión decisiva. Mientras tanto, la anterior directiva no ha tomado aún una decisión definitiva sobre su continuidad. Según ha podido saber este medio, estarían dispuestos a seguir, pero únicamente si el Ayuntamiento de Bollullos cumple con los compromisos adquiridos, especialmente en lo económico.
Y es que la paciencia tiene un límite. La pasada campaña, el club vivió una delicada situación financiera al estar tres meses sin poder pagar las mensualidades a los jugadores, debido al retraso de las subvenciones municipales. Un problema que afectó no solo al vestuario, sino también a la credibilidad del proyecto.
En este clima de indefinición, el nombre de Antonio Calle sigue sobre la mesa como prioridad para continuar liderando al equipo desde el banquillo. Sin embargo, no será fácil convencer al técnico. Tras una temporada sobresaliente, repetir el éxito parece complicado. La categoría se ha potenciado con los descensos de Segunda RFEF, y la actual inestabilidad institucional tampoco ayuda a ofrecerle un proyecto sólido.
Mientras se espera el desenlace, la plantilla comienza a desmoronarse. El primero en salir ha sido Carlos Ramírez, que pone rumbo a Segunda RFEF para unirse al Salerm Cosmetic Puente Genil. El centrocampista, fundamental en los esquemas de Calle, jugó los 32 partidos de la última temporada como titular y firmó un gol. A su salida podría sumarse la de Leo Merino, defensa clave en la retaguardia bollullera, que disputó 22 partidos (15 como titular) y marcó tres goles. Su destino, según fuentes cercanas, podría ser el Sevilla C.
El 12 de junio no solo se decidirá una nueva junta directiva: ese día puede marcar un antes y un después en la historia reciente del Bollullos CF. El club necesita certezas, estabilidad y compromiso institucional para evitar que un proyecto ilusionante se diluya entre promesas incumplidas y tiempos de espera. El balón está en el tejado de quienes deben dar un paso al frente.
