CAROLINA REGRESA PARA DEFENDER SU TRONO EUROPEO EN MADRID

(Fotos: Carolina Marín / @CarolinaMarin)

  Hay costumbres que no deberían perderse nunca; levantarse temprano un domingo, para ver a Carolina jugar una final, es una de ellas. Nuestra campeona lleva algún tiempo alejada de las pistas, pero podremos verla de nuevo en acción en el Campeonato de Europa Absoluto que se va a disputar en Madrid, a partir del próximo lunes 25; un torneo que, siendo en nuestro país, no nos va a exigir ni el esfuerzo de madrugar para poder disfrutar de la onubense. Y bueno, hablando de costumbres, en Huelva nos habíamos habituado ya a bajar las escaleras de casa y encontrarnos el mejor bádminton del mundo, cruzando la acera; una lástima, pero no se puede tener todo, y nos conformamos con que Carolina se encuentre a sí misma, disfrute y, por qué no, gane su sexta corona Europea. Y, por supuesto, que un evento de estas características vuelva a ser en España no deja de ser un éxito de todo el bádminton nacional.

No será fácil o, mejor dicho, no conocemos el nivel de exigencia que va a encontrar Caro, porque la principal incógnita está en ella misma. Físicamente está bien, porque de otro modo no participaría, pero ni ella misma sabrá cómo se va a sentir en la pista, hasta que le vayan llegando las primeras sensaciones. No cuenta con un ritmo de competición que las demás sí tienen, y eso es ya una desventaja, y habrá que ver cómo responden su cuerpo y su mente cuando noten que vuelven a la competición “de verdad”. No es ningún secreto que Carolina sale, además de a probarse, a ganar, porque no concibe todo esto de otra manera; tampoco lo es que, si muestra un nivel aceptable, debería ser superior a la mayoría de las jugadoras presentes en Madrid. Y si consigue hacerse camino día a día, iremos descubriendo cuáles son sus opciones reales cuando llegue el momento de las «grandes». Pero su primera preocupación, se llama Katerina Tomalova.

Carolina no se han enfrentado nunca a la jugadora checa, a pesar de que tiene 30 años y muchos partidos a sus espaldas; se debe a que Tomalova no tiene ranking para participar en los torneos en los que lo hace la nuestra, lo cual habla muy a las claras de la diferencia de nivel que, sobre el papel, existe entre ambas. Aunque se trata de una volantista muy completa, rápida, y que defiende también muy bien los dobles, no es la más dura para darle la bienvenida a Caro, y estamos más que obligados a pensar en este duelo, en positivo.

Aunque el Europeo comienza el lunes, hasta el martes no debuta Carolina y, si vence , en octavos se mide a la ganadora del encuentro entre Sonia Goncalves y Maria Ulitina (vieja conocida onubense, y ex compañera suya en el IES La Orden); pero ya hablaremos, dejemos que primero hable ella en la pista.

Respecto a las otras favoritas, Line Kjaersfeldt podría ser la primera en su camino; la verdad es que a la danesa se le «atraganta» su amiga Carolina, pero si está en forma es una de las jugadoras más completas del circuito europeo. Y, «una rondita más allá», en teoría deberían pelear por un puesto en semis Line Christophersen y Neslihan Yigit; la primera, también danesa, es la más firme apuesta de futuro del viejo continente (vencedora del Super 300 disputado en Huelva el año pasado). Y de la jugadora turca sólo puedo decir que sé que dará un golpe en la mesa en algún momento, y quien sabe si será en Madrid. Por la otra parte del cuadro, «sólo» hay un puesto en la final para las dos gigantes que vienen por ahí, Kirsty Gilmour y Mia Blichfeldt; la escocesa es la última europea que derrotó a nuestra Carolina (aunque también ha perdido frente a ella dos finales europeas), y la (ojo) número 14 del mundo es, sin duda, la más peligrosa de todas: Mia ha pasado una línea que muy pocas pueden, y que no es otra que «tutear» a las jugadoras asiáticas. En otras circunstancias y con la onubense a buen nivel, nuestra campeona olímpica sería clara favorita; pero con tantas incógnitas abiertas, la danesa, si ambas se ganan el derecho enfrentarse la una a la otra, sería quien mejor midiera el punto real en el que se encuentra Carolina.

Pues eso; palomitas, por favor, que queremos ver a nuestra mejor embajadora defendiendo SU título, y no podemos esperar más. Seguro que ella tampoco.