IES LA ORDEN-CB RINCONADA | «VUELVE EL CLÁSICO DEL BÁDMINTON ESPAÑOL»

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Este sábado se escribe otra página, con una nueva final

(Foto: IES La Orden)

Los clásicos entre IES La Orden y el CB Rinconada deben dar ya para escribir un libro, y este sábado se escribe otra página, con una nueva final, y un montón de emociones a punto de saltar a la pista.  Aún recuerdo aquel año en que, finalizado el último encuentro, nadie sabía quién había ganado la liga; habíamos empatado a casi todo, hasta que, entre la multitud y el desconcierto, de pronto vi a Carolina Marín llorando en una esquina. Habíamos perdido. Fueron cuatro victorias consecutivas del conjunto sevillano que no desanimaron a los nuestros, y que dieron pie al estratosférico palmarés del Recreativo Ies La Orden en los últimos diez años; porque ese es el motivo por el que este año los dos quieran ganar, más que ningún otro: ellos, porque llevan mucho tiempo sin hacerlo, y nosotros, porque daría sentido a la travesía por el desierto que nos «hemos comido» sin merecerlo, y cerraría un círculo para esta plantilla que iría mucho más allá de lo deportivo. Lo habrían hecho, una vez más.

 

Si una palabra define, a priori, esta final, sin duda es igualdad. No me parece favorito ninguno de los dos, y por eso creo que el desenlace tendrá unos protagonistas que años atrás habrían sido ignorados: los detalles. Y es que aquí van a contar la suerte en los cruces, el acierto en las alineaciones, el día más o menos afortunado de quienes juegan y, si me apuras, hasta el clima del África meridional. Pero, sobre todo, la afición: Rinconada es siempre un oponente formidable, pero aún lo es más allí porque, defendiendo su casa, se multiplica; por eso es importante que el equipo aguante el tirón, se traiga algo que invite al optimismo, y pueda rematar la faena en Huelva, con los suyos.

 

A comienzos de temporada, cuando Rinconada presentó su plantilla, me pareció la más completa y con más posibilidades de alzarse con el título. Sin embargo y, como suele suceder en nuestra liga, no es fácil para los jugadores foráneos participar en la misma, y cumplir con sus compromisos internacionales. Este año no sonará el también clásico «los ingleses no han venido», un cuarto de hora antes de comenzar el partido, porque ya sabemos que sólo Tom Wolfenden puede jugar; la normativa ha dejado fuera al resto y el inglés, que refuerza aún más su potente dobles masculino, jugará también el mixto y, «si viene», allanará el camino para que Piris y Alejandro Pérez jueguen los individuales. En cuanto a las chicas, un nombre propio: Nerea Ivorra, quien se está marcando un final de liga como ya hiciera aquí, y en ese plan cuentan con ella para derrotar a quien sea. Y entre las distintas estrategias posibles, quien sabe si no «aflojan» algo el dobles femenino, para que Laura Molina pueda jugar un individual y, quien sabe si…

 

¿Laura Molina contra Haideé Ojeda? Pues si tuvieran la llave del triunfo enfrentándose la una a la otra sería mucho más que poético, porque ambas son los corazones de sus equipos, y es a su corazón a quien tendrían que ocultarle que son amigas, al menos, durante un rato. Quién sabe. Lo «esperado» es que Haideé forrme pareja con Telma en el dobles femenino, porque juntas son temibles, y con Pablo en el mixto, para tratar de arrancar la tarde con una victoria. Hay que imponerse en dos de esos tres dobles porque, quien sólo ganase uno, se vería obligado a ganar tres individuales, algo que parece complicado dada la igualdad que se presupone. Y ahí tenemos nosotros «lo que no tiene nadie», a Pablo Abián y a Telma Santos, quienes junto a Ale Pérez y a la enorme Laura Santos, tienen la misión de cerrar una velada que sin embargo abra, las puertas del título de la División de Honor. Tampoco me sorprendería ver jugar «en solitario» a Víctor Martín, a quien a sus virtudes hay que sumar una muy para la ocasión: su absoluta inalterabilidad, por muy tensa que se ponga la cosa.

 

Sólo es un trocito de final, el otro tendrá lugar en Huelva, el día 23. Pero estará marcado por lo que suceda este sábado, porque las cartas de la sorpresa ya no serán tan buenas en el partido de vuelta, y porque es más difícil dar la vuelta a un marcador, que proteger el que tienes.

 

P.D.: el bádminton es un deporte que se disfruta en vivo. El IES La Orden pone un autobús para todo aquel que desee viajar con el equipo por el precio de 2 euros, todo incluido. Es un bonito y plan y, para quien vaya presiento, como dijo aquel, que este sería el comienzo de una hermosa amistad.

 

 

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