18 años de un recuerdo imborrable: la tragedia del autobús recreativista
Se cumplen 18 años de aquella fatídica noche en la A-49
Hoy, 20 de diciembre, se cumplen 18 años desde aquel fatídico día que marcó para siempre la memoria de los aficionados del Decano del fútbol español. Un autobús lleno de ilusión partía hacia la capital de España para presenciar un partido histórico: el Real Madrid-Recreativo de Huelva, en el que el conjunto onubense dio la campanada al vencer por un contundente 0-3 con goles de Sinama Pongolle, Uche y Emilio Viqueira.
Lo que debía ser un día de fiesta y orgullo para los recreativistas se tornó en tragedia cuando un accidente de tráfico acabó con la vida de cinco personas. Sebastián, Isabel, Francisco Javier, Mariano y María fueron las víctimas de un suceso que dejó una huella imborrable en los corazones de todos los que sienten los colores del Recreativo.
Cuando se conoció la terrible noticia, el abatimiento fue absoluto. La alegría y el entusiasmo se transformaron en lágrimas y consternación. En ese entonces, el Recreativo de Huelva, presidido por Francisco Mendoza (quien también nos dejó), solicitó a la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) la suspensión del partido.
Sin embargo, la petición fue rechazada por el organismo federativo. En su resolución, se indicó que, pese a la tristeza de los hechos, el desarrollo normal de la competición debía prevalecer. Se recomendó que, antes del encuentro, se guardara un minuto de silencio en homenaje a las víctimas y que los jugadores portaran brazaletes negros como señal de duelo, extendiendo esta recomendación al resto de los partidos de esa jornada.
El partido se jugó, pero quedó marcado por el dolor y el respeto hacia aquellos que perdieron la vida en aquel fatídico accidente. La memoria de las víctimas permanece viva en los corazones de todos los recreativistas, quienes cada año recuerdan con cariño y respeto a los que ya no están.
La tragedia no solo impactó a los aficionados, sino que también fue motivo de inspiración para la comparsa isleña “La orilla de la sal”, que compuso un emotivo paso doble en honor a aquel día y a las personas que perdieron la vida. Este homenaje musical se ha convertido en un recordatorio del amor por el equipo y la hermandad que une a los recreativistas, incluso en los momentos más difíciles.
18 años después, el recuerdo sigue vivo. Los nombres de Sebastián, Isabel, Francisco Javier, Mariano y María resuenan con fuerza en cada rincón del onubensismo, porque nunca podremos olvidarlos. Este día sirve para rendir homenaje no solo a quienes partieron, sino también a la pasión que une a una afición dispuesta a recorrer kilómetros por su equipo. No sólo la comparasa pudo rendir homenaje a través de la música; otro artistas onubenses se unieron a esta causa, como por ejemplo Sergio Contreras que con su tema «Azul y Blanco».
Hoy, como cada 20 de diciembre, la familia recreativista se une para recordar y honrar a quienes no están, pero cuyo espíritu sigue presente en cada victoria, en cada himno y en cada paso doble que evoca su memoria.